El candidato ungido por el presidente fallecido rechazó en Táchira las burlas que recibió después que asegurara que el líder de la revolución se le apareció en un “pajarito
Tachira - Molesto por las burlas, el candidato rojo a la presidencia, Nicolás Maduro, pidió respeto a su “espiritualidad” y a su encuentro con el presidente fallecido Hugo Chávez, a través un “pajarito chiquito” que se le apareció mientras rezaba.
El aspirante se pronunció desde el estado Táchira en el segundo día de campaña, donde pasó revista a las grandes misiones y se comprometió a mantenerlas de llegar a resultar electo.
“Yo tengo derecho a sentir lo que sentí, burgueses, inhumanos, irrespetuosos. Sentí el espíritu del comandante Chávez y la bendición para esta batalla. Así lo sentí. Cada quien es libre de creer en lo que lo haga feliz”, alegó el también presidente encargado gritando frente a la multitud en la Quinta Avenida de San Cristóbal.
“Conté algo que me pasó. Si me sucedió, bueno, me sucedió, y yo me siento feliz de que haya sucedido. Mi espiritualidad es mía, y me dio la gana de compartirla con el pueblo”, explicó exaltado.
El abanderado del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) contó el martes desde la casa donde creció Chávez en Barinas, que estaba rezando cuando de repente vio un pajarito. Luego afirmó que el líder de la revolución se le apareció en el ave para bendecirlo, lo cual produjo una serie de burlas en la oposición y en la red social Twitter. “Andaban ellos que si el pajarito de Nicolás. Dios, perdónalos por su maldad, por su odio. Respeten”, exigió.
Al respecto, el dirigente opositor Leopoldo López calificó de “grave” el hecho y dijo que podrían estar en presencia de alguien que ve alucinaciones. “Pongo en duda el equilibrio mental del señor Maduro”.
Misiones y silbidos
Maduro llegó a la tarima en un camión abriéndose paso entre la gente, emulando a Chávez en la campaña anterior. Se trasladó acompañado del gobernador de la entidad, José Vilema Mora; y su pareja, Cilia Flores quienes recibían las peticiones que les lanzaban.
Con el audio del Himno Nacional entonado por el mandatario fallecido, y la canción oficial de la campaña, inició el acto a la 1:10 pm.
El candidato inició su discurso recordando los cinco objetivos del Plan de la Patria y preguntó al público si se los sabía, tal como Chávez hacía en los mítines.
Siguió con un balance de la Misión Agovenezuela y dijo que en Táchira registraron a 18 mil 40 personas y han beneficiado a 16 mil.
Luego, con un discurso firme y continuo, dijo que inscribieron 96 mil 693 mujeres en la misión Hijos de Venezuela, pero sólo beneficiaron a 4 mil 500, y ordenó trabajar en ello.
Maduro aseguró que él garantiza la continuación de las misiones de llegar a ganar el 14 de abril.
Después se desvió del tema y cargó contra el candidato Henrique Capriles. Lo tildó de “caprichito, caprichito, burguesito”. Maduro retomaba el tema de las misiones, pero en seguida volvía a embestir contra su adversario e invitaba a sus seguidores a hacer “el baile de Nicolás”, silbaba, y besaba a Flores acompañado de aplausos que se diluían. Así continuó el evento, hasta las 3:11 pm que culminó.
Con la voz ronca desde una tarima en Mérida, Maduro le declaró la guerra al triunfalismo y le pidió a sus seguidores no confiarse y acudir a votar el 14-A. También aseguró que más tardar el 30 de abril abrirá el aeropuerto de Mérida con rutas comerciales. “Cuidado con el triunfalismo. Nosotros al frente tenemos una derecha llena de mañas,”, advirtió el presidente (e
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