“Estamos cansados de burlas, el pueblo tiene hambre

29/01/2014


Barcelona.  La búsqueda de los productos de primera necesidad originó ayer otro enfrentamiento en el municipio Bolívar.
Decenas de amas de casa, jóvenes y personas de la tercera edad comenzaron a congresarse desde la noche del lunes fuera de la sede del Mercado de Alimentos (Mercal), ubicado en la plaza San Felipe de Barcelona, para tratar de comprar harina, leche y azúcar.
Sin embargo, pasadas las 9:00 am del martes, les notificaron que debido a una emergencia personal de la gerente del establecimiento (no fue precisado el nombre), no se abriría el local.
“Estamos cansados de burlas, el pueblo tiene hambre”, manifestó la habitante del sector Portugal Abajo, Carmen de Fernández, quien indicó que tiene más de una semana “cazando” los productos de primera necesidad.
Michel Álvarez, vecina de Guamachito, contó que les comentaron que no iban a vender en el Mercal por la ausencia de la encargada.
“No es posible que después de tantas horas haciendo cola nos vengan con eso, ¿es que acaso otras personas no pueden hacer ese trabajo?”, cuestionó.
El ama de casa Viviana Torres aseguró que regularmente, luego de esperar por hasta medio día para poder adquirir los productos, al corresponderles su turno les comunican que ya no hay mercancía.
“A veces traen los camiones de pollo, y dicen que tienen que hacer inventario y se pasan hasta tres horas en eso, y luego no venden nada, pero después vemos saliendo a los trabajadores con la mercancía”.
Ante las quejas y protestas de los presentes, efectivos de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) se presentaron en el lugar, y en medio de la situación de confusión que se vivía, amenazaron con llevarse detenido a uno de los presentes, alegando que presuntamente iba a quitarle su armamento a un oficial.
Manuel Moreno, vecino de Barcelona, aseguró que constantemente los uniformados les faltan el respeto.
“Yo soy chavista, pero quiero que lo publiquen, nos maltratan verbal y psicológicamente, irrespetan a las personas de la tercera edad, diciéndonos que a ellos no les importa que tengamos que hacer cola en medio del sol”.
Petti Pérez, otra de las presentes, consideró que parte del problema es que las personas no saben organizarse.
A las 10:45 am, funcionarios de Mercal dialogaron con los protestantes.
Yinder Saldivia, coordinador de Gestión Socialista de Mercal, indicó que realizarían en horas del mediodía de ayer una venta a cielo abierto de ocho toneladas de alimentos para beneficiar a 500 personas.
Con marcadores, los usuarios se colocaron números en los brazos para poder hacer las compras.
Problema generalizado
Paralelamente, un grupo de administradores de Mercalitos acudieron a la sede de la Gobernación de Anzoátegui para exigir respuesta, pues al parecer, desde el pasado 13 de diciembre no están distribuyendo mercancía a 92 bodegas comunitarias.
Daisy Rodríguez, encargada de uno de estos establecimientos en Mayorquín, fue quien hizo la denuncia.
“Ya hemos pasado comunicaciones y nadie nos da respuesta. A veces nos mandan mercancía, pero muy poca, cuando mucho cinco pacas de cada artículo y eso se acaba en un día”.
Gregoria García, del sector Las Carmelitas, también se quejó por las presuntas fallas en la distribución.
El coordinador de Gestión Socialista de Mercal, Yinder Saldivia, desmintió que haya problemas en el envío de mercancía.
El funcionario informó que se encuentran en una fase de revisión de todos los establecimientos, a fin de verificar su operatividad.
Saldivia estimó que en un plazo máximo de un mes podrían reabrir los locales cerrados.
“Unas 300 personas estarán participando en estas fiscalizaciones, con miembros de la contraloría social, alcaldías, y consejos comunales”.

9 horas
Afirmaron que tenían muchos de los ciudadanos fuera del Mercal, en la plaza San Felipe, para adquirir los productos. “En ocasiones llega la mercancía y a los cinco minutos se acaba, y los primeros que pasan a comprar son policías”, dijo Flor Viña.

46 días
Sin recibir mercancía aseguraron que tienen los encargados de algunas bodegas comunitarias, denominadas Mercalitos. Daisy Rodríguez, administradora de un establecimiento en el sector Mayorquín, comentó que unas 6 mil familias están afectadas directamente.