Caracas. El cuatro veces ministro del gobierno del ex presidente, Hugo Chávez, Héctor Navarro, pagó un precio por haber salido en defensa del ex titular de la cartera de Planificación, Jorge Giordani, la suspensión de su condición de militante y miembro de la Dirección Nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), mientras el tribunal disciplinario decide su expulsión o permanencia.
Pero más que la posición asumida por el ex ministro de Energía Eléctrica al tratar de reivindicar al vapuleado Giordani, su compañero de la “red socialista de la UCV”, fue la sanción la que desató enfrentamientos entre la alta dirigencia roja.
Entre las voces chavistas que rompieron el silencio para solidarizarse con Navarro se encuentran la de la ex ministra del Ambiente de Chávez, Ana Elisa Osorio.
En contra de los “desleales” se apuntó ayer el gobernador de Carabobo, Francisco Ameliach, entre otros. Osorio exhortó a la Asamblea Nacional, presidida por Diosdado Cabello, a “desempolvar” la ley contra la corrupción para castigar a quienes han incurrido en delitos contra el patrimonio público.
“Esos son los grandes traidores a la Revolución” afirmó la actual diputada del Parlamento Latinoamericano y miembro de la dirección del Psuv, a través de su cuenta en la red social Twitter.
Este martes, el presidente de la República, Nicolás Maduro, exigió “máxima lealtad” durante el desfile por la Batalla de Carabobo en dicha entidad.
Dos horas después, se publicó en el portal chavista Aporrea, el mismo que dio a conocer la carta de Giordani hace una semana, otro polémico escrito, esta vez de Navarro.
”¿El traidor es Giordani porque, por ejemplo, denunció la asignación de dólares a empresas de maletín y propuso cursos de acción para impedir que eso siguiera ocurriendo? o ¿traidores son, aunque eso no se dice, los que no asignaron los dólares que hoy requieren los Hospitales, o necesarios para la producción y para satisfacer las necesidades del pueblo?”, se preguntó el ex ministro de Educación.
Por si fuera poco pidió a Maduro reflexionar y comportarse como un estadista, al tiempo que solicitó respuestas a las denuncias de Giordani sobre mal manejo de fondos públicos y la interferencia de un grupo francés en las políticas económicas.
Transcurrieron casi tres horas más de la noche del martes, cuando Navarro comunicó que Ramón Rodríguez Chacín, miembro de la instancia disciplinaria pesuvista, lo llamó por teléfono para notificarle la suspensión.
Extraoficialmente se supo que el destino de la periodista Vanessa Davies, junto al de Giordani y Navarro, también se está discutiendo en el seno de la tolda roja.
El gobernador de Carabobo, Francisco Ameliach, no se quedó atrás y también reaccionó con fuerza frente a los detractores internos de la gestión de Maduro.
"Ministro de Chávez que traicione al presidente Nicolás Maduro, es porque tuvo una relación hipócrita con el Comandante y nunca tuvo la voluntad y el coraje de decirle en vida las críticas que hoy hacen a Maduro y que son falsas. Es falso que Maduro esté cerrado a la autocrítica”, sentenció el directivo pesuvista, durante su programa radial semanal, “Hablando de Poder”.
Advirtió que los “sabios” que ahora quieren imponer criterios al jefe de Estado saben “el daño que le hacen a la revolución” y mostró confianza en que el chavismo superará el nuevo trance. “No podemos permitir que algunas individualidades generen fisuras en nuestro partido”, acotó.
El ex ministro de Industrias Básicas y Minería (2005-2006), Víctor Alvarez también se pronunció.
“Stalinismo puro y duro: Navarro pasado al tribunal disciplinario y suspendido de la Dirección Nacional por levantar su voz crítica”. Llamó “valientes” a quienes desde el chavismo no han guardado silencio ante los errores de las políticas gubernamentales a riesgo de ser defenestrados e instó “al poder” a practicar la crítica constructiva en lugar de exigir “lealtad absoluta”.
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