La majestuosidad de aquella sede deportiva que brillaba en 1979 y parte de la década de los 80, se fue apagando con el transcurso de los años
“El Coca era un muchacho muy querido en esta comunidad. Representó en muchos campeonatos de béisbol al estado Anzoátegui. Era una máquina para hacer carreras con el bate”, manifestó con nostalgia Compaíto.
Sin embargo, las condiciones del estadio no están a la altura de una figura admirada como Coca Salazar, tampoco a la de los atletas que todas las semanas pisan el terreno de juego, ni a la del público que asiste a animar a los jugadores.
La majestuosidad de aquella sede deportiva que brillaba en 1979 y parte de la década de los 80, se fue apagando con el transcurso de los años para darle paso a un estadio con las carencias de un rancho.
Pésimo
El estado deplorable del terreno de juego perjudica la acción de los peloteros de la Liga Criollitos de Venezuela. Los desvíos del trayecto de la pelota son frecuentes debido a la superficie irregular en el campo corto y los jardines.
En varias oportunidades la bola pega en el rostro de los peloteros. Unas gradas deterioradas y con el techo roto son las instalaciones que reciben a niños, jóvenes y adultos que acuden a los partidos.
La mayoría de las láminas tienen agujeros y otro tanto se desplomaron sin que ningún ente las repare o las reponga. Cuando llueve los presentes deben desalojar el lugar porque no hay manera de protegerse del chaparrón.
A oscuras
El señor Arsenio Calzadilla, entrenador del equipo de fútbol Guanire Sport, señaló que al estadio hay que hacerle un mantenimiento completo.
Los juegos sólo se pueden desarrollar hasta las 5 de la tarde porque el alumbrado es insuficiente.
“Hace falta que arreglen las torres de luz, esto se pone muy oscuro de noche. Además, son muchos equipos que quedamos limitados con el tiempo para jugar de día. Aquí a duras penas se juega fútbol, béisbol y softbol”, indicó Calzadilla.
Los dos sanitarios del coso deportivo no funcionan y es mejor tenerlos cerrados para evitar enfermedades o alguna infección.
La cerca perimetral está destruida, tampoco hay un portón y por los lados del jardín izquierdo se filtran las aguas negras. Varios tubos de las tribunas se despegaron con el óxido y las porterías de balompié no tienen la red para detener el balón.
La cancha de baloncesto que está a un lado de las gradas, hace años fue desmantelada y no tiene cerca perimetral. Los mismos jóvenes de Guanire reúnen dinero entre ellos mismos para reponer los aros y las mallas.
Vecinos del sector no recomiendan caminar de noche por los alrededores del estadio porque a veces se meten los delincuentes.
Le hacen un llamado a la Alcaldía de Sotillo, a la Gobernación y a Pdvsa para que rescaten el espacio deportivo que en una oportunidad fue el orgullo de Guanire.
Disfrutan en familia
A pesar de estar “casi en coma”, los fines de semana el estadio Luis “Coca” Salazar cobra vida gracias a los torneos de béisbol, softbol y fútbol que allí se desarrollan. Los niños, jóvenes y adultos tienen la oportunidad de compartir las mañanas y las tardes rodeados de un ambiente familiar y deportivo. Entre ellos mismos colaboran para mantener limpias las instalaciones del estadio.
2 comentarios:
camarada buenas leonardo bolen usted siempre ayudado ha muchas gente por favor amigo. que siempre ha venido ha este estadio denos una ayudan con el problema que tenemos en guanires donde hacemos deportes todos los días ya que nadie no a ayudando a repara la infraestructura ni la alcaldia de sotillo gracias,
Bolen somo un grupo de pelotero q hacemos vida en estadio luis coca zalazar de guanire donde jugamos pelota y no acompaña nuestras familia y hijos para pasa un bues rato de espacios de fin de semana te asemos esta perticion para que no ayude con el candidato a las gobernación aristobulo.
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