Los trabajadores artesanales exigieron mayor presencia policial para su seguridad y la de los turistas. Además, criticaron la medida establecida por el gobierno municipal que restringe la circulación por el paseo hasta las 11:00 de la noche. “No tenemos derecho al trabajo, les pedimos que deroguen ese decreto”, aseguró Luis Fernández.
El presidente de Asoartesanos, Freddy Cedeño, explicó que la alcaldía de Sotillo les cedió un espacio y están siendo “invadidos” por personas no registradas en el grupo. Los visitantes se quejan de los vendedores informales “sucios y harapientos”, según indicó, y les están restando prestigio a los asociados.
Denunciaron también deficiencias ambientales y de infraestructura. Andrés Herrera hizo un llamado al ayuntamiento para que se avoque al saneamiento de la playa y repare un muro que se encuentra roto desde hace dos años. Asimismo, José “Cheo” Martínez recordó que necesitan baños públicos, bancos ornamentales y evitar el paso de motos por la acera.
Cedeño exhortó a las autoridades y movimientos promotores del ámbito cultural a que apoyen el mantenimiento de la artesanía. “Les pedimos que recuerden que nosotros somos cultura”, expresó. Por otro lado, Zulay Rodríguez, mujer de 35 años en el oficio, pidió reconocimiento profesional para los artífices.
Richard Casanova, coordinador de la ONG, saludó la organización y la vocación de trabajo de los miembros de la asociación. “El gobierno necesita invertir en el desarrollo de este paseo, cambiarle el nombre no fue suficiente”, apuntó.
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